Como regar nuestras plantas de interior es importante para tener unas plantas sanas.
El exceso de agua provoca daños que afectan de modo irreversible a las plantas.
La pauta de riego es uno de los factores clave en el cuidado de las plantas en casa o en la oficina. La humedad constante conlleva problemas fitosanitarios que afectan al desarrollo de las plantas. Un exceso de agua en el sustrato durante días es una causa de podredumbres de raíces. Estos daños no son fáciles de recuperar y acaban provocando una pérdida de hojas, tallos y de la totalidad de la planta.
Debemos regar en función de las necesidades de cada planta. El tipo de especie, el lugar donde este ubicada y la época del año condicionan la pauta de riego.
Las plantas de hojas carnosas como son las crasas, los cactus, algunas orquídeas y plantas de interior como sansevierias, pileas, begonias... precisan riegos distanciados. Una buena pauta es dejar secar el sustrato entre riego y riego. Al regar, es importante realizar un aporte de agua abundante, que moje bien toda la tierra hasta el drenaje.
En primavera y verano, época de más horas de luz y temperatura, hay una mayor demanda hídrica y más actividad vegetativa; debemos procurar que no falte agua, los riegos serán más seguidos sobre todo para plantas de mayores necesidades.
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